¡Demasiado he andado en éste mundo!
¡Si... nunca quise pasar los cuarenta!
temía a la vejez, a andar sin rumbo,
a la soledad, desamor, al fin...

Si, pienso en ello. ¿Cómo he de morir?
Si duermo profundo... ¿Despertaré?...
¿La muerte será dura, sufriré?
Sonrío resignada, como sea...
no podré a esa hora, del destino, huir.

Sigo sin temerle y aquí la espero
la desafío, agradecida estoy.
Tuve hijos, planté un árbol, se quien soy.
Escribí un libro, si no lo hice bien...

Si... cumplí y lo que hice mal, lo pagué.
Amé y fui amada, siempre enamorada,
aprendí a perdonar lo imperdonable,
hasta eso, logré y me felicité...

No fue fácil, pero tuve coraje,
para derrotar al dolor con risas.
Mas de alguna vez el llanto contuve
sin mostrar el peso de mis dolencias...

Si me quebré ante variadas carencias
fue el desahogo de mi lado débil,
soy mujer y a veces siento el cansancio
por lo mismo, emerjo de lo mas hondo.

Muerte, puedes venir, toma mi mano
mi risa se queda aquí, con los que amo
así habrán de recordarme... sonriendo
mis ojos encendidos y el amor...
aquí... en mis manos, hacia Ti... extendidas

Matty Canales
Santiago - Chile