Un hombre como él


Porque no existe un hombre como él,
el mundo se vuelve nada,
porque no resisten como él
se desintegra la esperanza.
***
Un sólo hombre que repita
sus palabras en la tierra,
un sólo hombre que nos diga,
cómo librarnos de guerras.
***
Pero el poder y la ignorancia,
se han mezclado y juntas fluyen,
como una fuente de agua salada
como el río que al mar no huye.
***
Somos estatuillas de hielo
que se derriten a cero grados,
y estamos maniatados,
con hilos de seda, añejos.
***
Tenemos cerebro y no pensamos,
palabras que no decimos,
pues en la tierra vivimos,
sin saber... siquiera amarnos.
***
¿Qué pasó, con su enseñanza?
¿Para qué entonces su muerte?
Si quedamos como inertes,
sin aprender de sus andanzas.
***
Hoy cae el cielo a nuestros pies,
pedazo a pedazo lo veremos,
y no ha quedado de su mies,
ni una semilla, no hay cosecho.
***
Vivimos, por el placer,
somos cobardes ante lo cruel,
cerramos los ojos para no mirar,
que frente a nosotros está él.
***
Aquel que no gritó al dolor,
aquel que nos dejó, a salvo de pecados,
aquel, hijo de Dios,
que aún ante nosotros... es crucificado.
***

Carmen Flores
Poeta de la ternura
Cabo Rojo - Puerto Rico - 10/04l/2009

www.angelfire.com/poetry/carmenflores


 

 
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