LOS CAMINOS DE LA LUZ

Victoria Lucía Aristizábal

Los caminos de la luz se encienden con la mística llama del corazón que es un espejo de Dios y que se refleja en los hermanos de existencia revoloteando con la ciencia de la sonrisa que amplía los surcos por la avenida principal que es por donde marchan los sabios que no saben que lo son porque buscan las almas de otros para acariciarlas con su silencio cómplice de corriente humana, mientras renace en el Pesebre de Belén, EL NIÑODIOS, hecho hombre, que sale de las entrañas de una Virgen elegida por su santidad y en la profundidad del alma brotan felices los cánticos que marcan la puntuación del 2012, un despertar único en nuestra historia, entrelazando las bondades que se han fabricado para celebrar nuestra calidad humana en este plano terrenal y aunque las manifestaciones de la Naturaleza son fuertes nos avisa que está en estado grávido para gestar una nueva era de luz, reuniendo las luces de las almas que han transitado con honor su propia vida.

Debemos salir de las pautas establecidas y habituales inducidas por el implacable destino, nos dice la intuición sabia que en esta época se amplia como la alarma conectada al cordón umbilical del universo y nos impulsa para recordar cuánto hemos sido amados por el amor propio, cuanto amor hemos ofrecido, dado, generado, bendecido, proyectado, elaborado, y aunque hayamos tenido obstáculos, son justamente ellos los que afianzan el poder dentro de nosotros mismos, nuestra consistencia interna, las raíces que aferradas a la tierra chupan la savia que recorre el tallo de nuestro cuerpo sutil entregándonos el venero del resplandor divino que se calienta en la ternura de nuestra mocedad espiritual y cuando brota para germinar, solo se siente el aroma del amor esplendorosamente perfumando.

La armonía abraza nuestra corteza húmeda y bajo las hojas verdes de un verano que comienza las manos manchadas de musgo ya han fabricado caminos hacia el Belén que existe en cada hogar que venera la venida de nuestro Jesús, nuestro Salvador, nuestro siempre eterno amigo que nos recuerda cada año cuan importante es el amor de la familia unida en ese hermoso árbol de vida que se gestó para dar el mejor fruto y en esta cercanía de valores superiores, libres, íntimos, acogedores, felices, sabedores de la verdad que existe nos obsequiamos el pan en la mesa como tributo al reconocimiento de la abundancia que está dada para todos los que la trabajan con honradez haciendo partícipes a los que les es imposible conseguirla por sus propios medios.

Bendito seas por siempre Señor Dios Todopoderoso y eterno que nos facilitas este nuevo camino de luz apretándonos contra tu pecho amantísimo, tomando de tu belleza la avidez espiritual que el alma necesita para mantenerse nutrida, dispuesta a caminar con potencia el prestigio de poseer la eternidad en ella y colmado el corazón del azul del Amor que transita después de que ha sido liberado del yugo del pecado, el espíritu estrecha entre sus lazos la aurora que señala los meses próximos de un año que marcará la diferencias entre los que lo esperan con profundo amor y valor o aquellos que le temen porque saben que han perdido mucho de su valioso tiempo obstruyendo el flujo de su propia energía que les ha hablado a través del tiempo vivido sobre cómo construir una vida con los materiales nobles que se nos fueron dados desde siempre, un rubro de permanencia y de conciencia que aviva la llama del verbo divino y en el trono del corazón toman del Absoluto el todo que inciensa la belleza que desde el origen está esperando ser cantada con la voz entrenada en la mente que se ha afirmado a través de un discernimiento consciente de crear la virtud en hologramas de imantación infinitamente modulada y audible en la orquestación de quienes seguimos caminando en esta nueva luz que ya se asoma del 2012 alumbrándonos el alma con más ímpetu abanicada con la brisa de este Diciembre sagrado donde oramos con mucha piedad para que toda la humanidad pueda estar alineada en esta frecuencia salvífica que nos trae las buenas nuevas enlazando el cándido reposo del Bebé recién nacido que dentro de cada uno de nosotros nada aun en el líquido amniótico y que sin desprenderse del cordón umbilical se aferra a la maternidad como lo hace Jesús con su Madre amantísima que en su serenidad le ofrece su amor incondicional con el que transitará como nosotros lo haremos en este 2012 y sí aferrados a la Madre Tierra,  a La Madre María,  a La Madre de nuestros hogares nos entregamos con infinito amor para acoger en nuestro pecho a los desprotegidos del mundo y les amamos con el amor que necesitan para que puedan restablecerse.

 

EN AMOR Y LUZ

Bogotá Colombia

Diciembre 9 de 2011



Fundo Musical: El Tamborilero - Los Niños Cantores De Navidad (Colombia)